La fascinante gastronomía tunecina combina la esencia de la cocina mediterránea con un toque único y la influencia de civilizaciones milenarias que han dejado su huella en cada plato. Como en todos nuestros viajes, el recorrido culinario tambén forma parte de la experiencia y estas son las comidas tunecinas que nos fascinaron:
El aperitivo tunecino: Aceitunas, pan y harissa
Antes de cada comida en Túnez, se sirve un irresistible plato de entrada. Este plato incluye aceitunas negras de una variedad muy pequeñita, acompañada por varios platos fríos y calientes, como encurtidos y salsas de yougurt, y la tradicional preparación de salsa harissa, que es una mezcla de chiles picantes, ajo y especias, bien regada de aceite de oliva. La combinación de sabores es simplemente adictiva y prepara el paladar para los platos principales que están por venir.
Lo mejor es que suele venir incluído en casi todos los restaurantes mientras esperas el plato principal.
Del Mar a la Mesa: Couscous au Poisson
Uno de los platos más emblemáticos de Túnez es el “Couscous au Poisson.” Este manjar combina el couscous, un grano de sémola fina, con pescado fresco y una mezcla de especias exquisitas. El pescado se cocina con tomate, cebolla, ajo y cilantro, creando un plato que es un verdadero festín para los sentidos. Es una deliciosa muestra de la influencia mediterránea en la gastronomía tunecina.
Este plato tradicional del las costas del Magreb puede conseguirse en casi cualquier casa tunecina, por lo tanto también puede pedirse en la mayoría de los restaurantes del país. Es la comida más representativa de Túnez, de la cual se sienten orgullosos y les encantará que lo prueben.
Su precio depende de dónde se consuma, pero en general es barato. Hay grandes restaurantes que ofrecen una variedad gourmet y especializada. Pero también existen pequeños recintos, restaurnates o casas famiiares que lo sirven con devoción a sus clientes. Además de ser la mejor preparación, también es lo más económico, con platos abundantes que cuestan cerca de 5 euros cada uno.
En este video disfrutamos mucho de una deliciosa mesa tunecina:
Delicias Callejeras: Makloube y Malfouf
Las calles de Túnez tienen aromas deliciosos, humeantes puestos de comida ofrecen los más auténticos platos callejeros. La increíble comida tunecina tiene una pizca de la herencia cultural, una mezcla entre oriente y occidente a través de los siglos de historia. En las calles de Tunis te encontrarás con dos preparaciones callejeras que son verdaderos tesoros gastronómicos: el makloube y el malfouf.
El makloube es un tradicional bocadillo con esponjoso pan árabe bañado en salsas bien condimentadas y relleno con verduras frescas, encurtidos, algun tipo de carne (pollo o pavo) y muchas especias.
Por otro lado, el malfouf es un rollo de tortilla casera de harina de trigo, relleno con variedad de ingredientes como fiambres, quesos, verdruas, muchas especias y salsas como la especialmente la emblemática salsa harissa, de la que hablaremos luego.
La creatividad tunecina le aportará el valor agregado, siendo muchas veces cada puesto quién determina los ingredientes según su disponibilidad. Las versiones pueden alternarnar entre algunos sabores, que incluyen salsas a base de pimientos, hierbas frescas y yogurt.
Ambas elaboraciones cuestan en promedio 2 o 3 euros cada una, dependiendo la zona de la ciudad. Generalmente, los puestos callejeros tienen mucha demanda y ofrecen variantes económicas de diferentes comidas. También hay muchos locales que venden la misma comida, aunque pueden cobrar un poco más por cada plato.
Otros Platos Típicos
La gastronomía tunecina ofrece una amplia variedad de platos más allá de los mencionados anteriormente. Entre los favoritos se encuentran el “Brik,” una especie de empanada rellena de huevo y atún, y el “Lablabi,” una sopa de garbanzos condimentada que es un alimento reconfortante en Túnez.
No importa a dónde te lleve tu viaje en Túnez, vas a encontrar sabores que te dejarán con recuerdos inolvidables de tu aventura en esta parte del mundo.
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